lunes, 26 de marzo de 2012

Otro empresariado es necesario


 

Si a un extraterrestre -desconocedor de nuestra sociedad- le mandáramos este foto para que se fuera haciendo una idea de lo que somos, se quedaría absolutamente horrorizado y, desde luego, se le quitarían las ganas de acercarse a nuestro planeta. Le pasaría lo mismo que me ha pasado a mí cuando la ví en la prensa hace unos días en referencia a la reunión que había tenido el Rey con los grandes empresarios españoles para pedirles que "hicieran un esfuerzo". Y seguro que nuestro amigo extraterrestre se haría las mismas preguntas que me hago yo.

¿Dónde están las mujeres?, es lo primero que se me ocurrió. Y, a continuación, ¿cómo procrean estos humanos? ¿Es posible que no haya ni una sola mujer suficientemente lista como para dirigir una gran empresa?

¡Y que feos son todos, madre mía! No tengo a mano ninguna foto de los grandes empresarios del franquismo, alguna foto de hace cuarenta años. Estoy dispuesto a apostar hasta la camisa de que sería, si no igual, muy parecida. Las mismas caras serias, los mismos trajes y corbatas, incluso en algún caso el mismo personaje, o como mucho un familiar, hijo o sobrino.

¿Qué pasa con los jóvenes? ¿Hay que tener más de sesenta años para ser un empresario importante? Tengo que reconocer que me produce cierta envidia cuando leo en la prensa que algún joven, evidentemente no español, ha triunfado como empresario y, además de eso, no va con traje y corbata ni suele ser tan feo como los que aparecen en la foto. Y si se me ocurre preguntarme porqué no hay grandes empresarios que no sean españoles de pura cepa y vieja raigambre, más de uno pensará que me he vuelto idiota.

Nada más alejado de la realidad de nuestro país que esta foto. Es rancia, antigua y, a la vez, desgraciadamente real.

Por eso, en estos tiempos en que tanto se habla de la necesaria reforma laboral, yo vuelvo a insistir en algo que he escrito en otras ocasiones: lo que este país necesita es una reforma empresarial. Una reforma que permita cambiar esa foto y abrir la puerta de las empresas, no para barrer que para eso ya están abiertas sino para dirigirlas, a los jóvenes con talento, a las mujeres que llevan décadas demostrando su valía, a tanto emigrante que construye país siempre que se le deja. Necesitamos una foto en la que estos sectores estén integrados, pues entenderían las relaciones laborales, seguramente, de una manera más humana que haría innecesaria esa reforma laboral tan agresiva que el gobierno de Rajoy pretende imponernos.

Y mientras esto no ocurra habrá que ir a la huelga el próximo jueves.

Muchas gracias. 



2 comentarios:

  1. Muchas gracias por el post, Emilio, con el que no puedo estar más de acuerdo: necesitamos más ética en nuestras cúpulas empresariales e innovación real, para progresar de verdad y dejar de involucionar.

    Un abrazo,
    miguel.

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  2. Y en la huelga estamos hoy. Esperemos que no seamos cuatro. Sobre lo de ser más o menos feos, dicen que la cara es el espejo del alma y en esta vida uno, si puede, elige cómo pasar los días. Por lo visto hay algunos que eligen vivir jorobando al prójimo.

    Un abrazo,
    Antonio

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