No se confundan queridos lectores, no se trata de una frase de nuestro ministro Wert, sino de Krista Kiuru, ministra de educación de Finlandia. "The Atlantic", periódico de Boston, publica una entrevista con ella con ocasión de su reciente visita a la ciudad.
El sistema educativo finés resulta paradójico para muchos observadores externos: la escolarización empieza a los siete años, el curso escolar tiene menos días de clase que la mayoría de los países, los "deberes" fuera del horario escolar son inexistentes, no existen centros para superdotados (o de excelencia), apenas hay escuelas privadas y no tienen tests estandarizados a nivel nacional; sin embargo, es uno de los países con mejores resultados en todas las pruebas internacionales.
Krista Kiuru, lo explica así: "Decidimos en los años sesenta proporcionar una educación igual, gratuita y de calidad a todos. Igual significa que apoyamos a todos y no estamos dispuestos a desperdiciar ninguna habilidad. Independientemente del género, procedencia social, o estatus todos los niños deben tener las mismas posibilidades de desarrollar sus capacidades Esto es importante porque así estamos potenciando el capital humano de nuestro país. No tenemos petróleo, ni minerales ni otros recursos naturales y por eso invertimos en capital humano, nuestro principal recurso"
"Nuestro sistema educativo está formando personas con un alto nivel de competencias y conocimientos. Tenemos clases con pocos alumnos, cada uno está en su clase, pero prestamos mayor atención a lo que tienen dificultades, porque son los que más lo necesitan. Eso nos permite asegurar que vamos a desarrollar el máximo potencial de cada uno"
La periodista, que había visitado Finlandia, le recordaba que en una escuela secundaria los alumnos estaban preparándose su desayuno, en otra comprobó que habían aprendido a coser sus propios bañadores, y que muchos profesores le insistían en que era muy importante para los alumnos realizar actividades diferentes durante el día. La ministra le confirmaba que " efectivamente para los jóvenes eran importantes los trabajos manuales, cocinar, realizar actividades creativas, el deporte. Todo ello les beneficiaba tanto o mas que lo que aprendían en la escuela"
¿No cree que eso les resta tiempo de su dedicación a lo académico?, le preguntaba la periodista. "Los chicos no necesitan solo conocimientos académicos, necesitan mucho más. Es en la escuela dónde deben aprender la vida, donde deben aprender todo lo que necesitan, todas las habilidades comunitarias y cívicas. La escuela debe ser importante, también, para desarrollar la auto estima, para ser sensible con los demás, para entender que el otro también importa".
Despuésde leer la LOMCE y de escuchar tantas veces a nuestro ministro y a sus secuaces todo esto nos suena a chino. Sin embargo, y me remito a los datos, así es como se consiguen excelentes resultados, manteniendo un ato nivel de equidad. Los buenos resultados académicos, que todos queremos para nuestros jóvenes, no están reñidos con la equidad, sino todo lo contrario. Cuando se segrega, se crean "centros de excelencia", se introducen exigentes estándares, se selecciona, no se consiguen buenos resultados para nadie. Eso es ya una certeza contrastada por muchos estudios.
¿Sr. Rajoy no podría mandar a su ministro a que hiciera un cursillo a Fnlandia? o mejor, ¿no podría cesarlo de una vez?.
Muchas gracias.
El sistema educativo finés resulta paradójico para muchos observadores externos: la escolarización empieza a los siete años, el curso escolar tiene menos días de clase que la mayoría de los países, los "deberes" fuera del horario escolar son inexistentes, no existen centros para superdotados (o de excelencia), apenas hay escuelas privadas y no tienen tests estandarizados a nivel nacional; sin embargo, es uno de los países con mejores resultados en todas las pruebas internacionales.
Krista Kiuru, lo explica así: "Decidimos en los años sesenta proporcionar una educación igual, gratuita y de calidad a todos. Igual significa que apoyamos a todos y no estamos dispuestos a desperdiciar ninguna habilidad. Independientemente del género, procedencia social, o estatus todos los niños deben tener las mismas posibilidades de desarrollar sus capacidades Esto es importante porque así estamos potenciando el capital humano de nuestro país. No tenemos petróleo, ni minerales ni otros recursos naturales y por eso invertimos en capital humano, nuestro principal recurso"
"Nuestro sistema educativo está formando personas con un alto nivel de competencias y conocimientos. Tenemos clases con pocos alumnos, cada uno está en su clase, pero prestamos mayor atención a lo que tienen dificultades, porque son los que más lo necesitan. Eso nos permite asegurar que vamos a desarrollar el máximo potencial de cada uno"
La periodista, que había visitado Finlandia, le recordaba que en una escuela secundaria los alumnos estaban preparándose su desayuno, en otra comprobó que habían aprendido a coser sus propios bañadores, y que muchos profesores le insistían en que era muy importante para los alumnos realizar actividades diferentes durante el día. La ministra le confirmaba que " efectivamente para los jóvenes eran importantes los trabajos manuales, cocinar, realizar actividades creativas, el deporte. Todo ello les beneficiaba tanto o mas que lo que aprendían en la escuela"
¿No cree que eso les resta tiempo de su dedicación a lo académico?, le preguntaba la periodista. "Los chicos no necesitan solo conocimientos académicos, necesitan mucho más. Es en la escuela dónde deben aprender la vida, donde deben aprender todo lo que necesitan, todas las habilidades comunitarias y cívicas. La escuela debe ser importante, también, para desarrollar la auto estima, para ser sensible con los demás, para entender que el otro también importa".
Despuésde leer la LOMCE y de escuchar tantas veces a nuestro ministro y a sus secuaces todo esto nos suena a chino. Sin embargo, y me remito a los datos, así es como se consiguen excelentes resultados, manteniendo un ato nivel de equidad. Los buenos resultados académicos, que todos queremos para nuestros jóvenes, no están reñidos con la equidad, sino todo lo contrario. Cuando se segrega, se crean "centros de excelencia", se introducen exigentes estándares, se selecciona, no se consiguen buenos resultados para nadie. Eso es ya una certeza contrastada por muchos estudios.
¿Sr. Rajoy no podría mandar a su ministro a que hiciera un cursillo a Fnlandia? o mejor, ¿no podría cesarlo de una vez?.
Muchas gracias.