sábado, 30 de junio de 2012

Regreso al pasado

El ministro Wert, experto en tertulias radiofónicas pero inepto en temas educativos, acaba de descubrir la piedra filosofal que le va a permitir reformar la educación (¿qué ministro de educación que se precie puede pasar por el ministerio sin poner en marcha una nueva reforma?) y, faltaría más resolver los problemas de nuestro sistema educativo, tan deteriorado por culpa de las decisiones de tanto socialista incapaz.

Me imagino cómo le pudo venir la inspiración al ministro Wert para resolver tan arduo problema. Quizás alguno pudiera pensar que informándose, leyendo documentos de la OCDE y de la Unión Europea (que hay muchos e interesantes), consultando a expertos en educación que también los hay; pues no, nuestro ministro utiliza otros métodos de investigación. Imagínenselo en su casa, por la noche, después de un día agotador de inaugurar cosas y decir tonterías, con un guisqui en la mano y preguntandose, ¿es que yo no recibí una buena formación en la escuela?, ¿no hay más que ver hasta dónde he llegado?, pues eso es lo que tengo que ofrecer a todos los españoles: una educación como la que yo tuve.

Y en eso está. Retrocedamos cincuenta años, volvamos a la época anterior al 1970 (cuando se hizo el primer esfuerzo modernizador del sistema educativo español) y ahí encontraremos las claves de la nueva reforma.

Parece un chiste pero es la realidad. Vuelta a las reválidas. Entonces había tres, la de bachillerato elemental (equivalente a nuestro 4º de la ESO), la de bachillerato superior (equivalente a nuestro bachillerato) y además había el exámen de Preuniversitario. No estaba mal. Después de tantos filtros los que conseguiamos pasarlos eramos unos pocos. ¿Es eso lo que se busca ahora?

Vuelta a la discriminación temprana del alumnado, dirigiendo a los "tontos" a la Formación Profesional en 3º de la ESO. En aquellos tiempos no se les enviaba a la Formación Profesional simplemente se les echaba del sistema.

¿Cómo encaja este planteamiento con las recomendaciones de PISA y de la Unión Europea, sobre la adquisición de competencias básicas? Volvemos a los contenidos puros y duros, a los exámenes cuyo objetivo no es otro que discriminar a los alumnos. Este ministro, ejemplo del jacobinismo reaccionario en materia educativa, no se ha conformado con recuperar la LOCE, de hace diez años, -que la ha integrado completamente en su modelo de reforma-, sino que ha seguido retrocediendo hasta llevarnos a la época anterior a los setenta. De momento ya ha dado unos cuantos pasos en esa dirección: el aumento de las horas lectivas de los docentes, el aumento del número de alumnos por aula, la rebaja de los sueldos... todas ellas son medidas que nos recuerdan aquellos tiempos.

Pues si se trata de regresar al pasado le quiero recordar al ministro que aquellos fueron los años en que la lucha del profesorado por sus derechos fué más intensa. Asi que ministro apriétese los machos porque ni profesores, ni alumnos ni familias le vamos a permitir que ejecute semejante atropello.

Muchas gracias.

lunes, 11 de junio de 2012

Carta a Mariano Rajoy

Señor Presidente:

El pasado viernes, en la rueda de prensa que la Vicepresidenta del Gobierno suele ofrecer a continuación del Consejo de Ministros, le preguntaron una decena de veces si se iba a producir un rescate de España en las próximas horas. Soraya Saez de Santamaría negó, por activa y por pasiva, que semejante cosa fuese a ocurrir, indicando que el gobierno no tenía nada previsto al respecto y que había que esperar a que las auditoras externas presentaran su informe sobre los bancos.

Tengo que reconocerle que, después de oir tanta negativa, quedé absolutamente convencido de que el rescate sería inmediato. Señor Presidente, espero que me comprenda, pero, después de haberle escuchado tantas veces decir una cosa y hacer luego la contraria, ya he aprendido a leer sus declaraciones, como creo que les pasa al noventa por ciento de la ciudadanía. Y no me equivoqué. Al día siguiente éramos informados de que España había sido rescatada.

Sí ya sé que a usted no le gusta que se le llame rescate. Y mira por dónde a mi tampoco me gusta. "Rescatar", según el María Moliner, es "liberar a alguien de la prisión, la servidumbre u otro estado de sujeción o miseria material o moral, mediante dinero u otro procedimiento". Que la inmensa mayoría de los españoles estamos en un "estado de sujeción o miseria material o moral" es cierto y que necesitaríamos que alguien o algo nos sacara de ese pozo, también. Pero el dinero que se le va a dar a los bancos --100.000 millones de euros-- no solo no nos va a sacar del pozo sino que nos va a hundir mucho más, pues las condiciones que la Union Europea va a ponernos irán apretando aún más la soga que ya tenemos alrededor de nuestra garganta.

Seguro que usted, Señor Presidente, piensa que estoy equivocado y que mi juicio sobre la situación no es objetivo. Puede ser, y por eso esperaba como agua de mayo esa explicación suya que me sacara del error.
Eso fue ayer. Escuché atentamente su intervención y me quedé más perplejo de lo que estaba. Resulta que no solo no necesitamos ningún rescate sino que lo que estaba pasando era un éxito del gobierno. "Ya estaba todo arreglado" y se podía ir tranquilamente a ver el partido de futbol de la Roja.

Señor Presidente, cuando Pinocho mentía le crecía la nariz y cuando usted miente le crecen los "tics". Su cara ayer en la tele, mientras sacaba pecho diciéndonos que era usted quien había presionado a los demás, era un poema: se le movía todo, ojos, mejilla, frente... Le aseguro que era dificil creerle; daba la impresión de que ni usted mismo se creia lo que estaba diciendo. Para mentir bien hay que ser un buen actor y, lo siento mucho, pero usted no lo es. Como me temo que va a querer seguir mintiéndonos y tratándonos como niños a los que hay que contarles cuentos para que no se asusten, me va a permitir darle un consejo: apúntese a una buena academia de actores; la de Cristina Rota tiene muy buena fama. Además, ahora le va a sobrar el tiempo pues será la "troika" (esos hombres de negro) la que se ocupará de meternos en cintura y usted estará más libre para mejorar su escasas dotes de actor, ir a ver los partidos de fútbol que tanto le gustan e, incluso, aprender un poco de inglés que no le vendrá mal.

Mientras tanto los españoles trataremos de seguir adelante, luchando para que no nos destrocen todo lo que hemos conseguido con tanto esfuerzo y haciendo las cosas bien con responsabilidad, sin mentirnos a nosotros mismos ni a nadie, para que este país, es decir los ciudadanos que en él vivimos, recupere la dignidad, la credibilidad y el futuro.

Muchas gracias.

lunes, 4 de junio de 2012

¡¡Que país!!

Algunos amigos me comentan que llevo diez días sin escribir en el blog. Es verdad. En más de una ocasión he pensado hacerlo, pero no me he encontrado con ánimo. Demasiadas noticias desagradables cada día como para ponerse a comentarlas.

Qué decir del "caso Divar". Un señor que gana 130.000 euros al año, que tiene coche oficial y varios escoltas para que le cuiden, que trabaja tres días a la semana y tiene el fin de semana "caribeño" (es decir, de cuatro días), eso le parece poco, y cuando se va de juerga a un buen hotel de Marbella o a uno de los mejores restaurantes de Puerto Banús, le pasa la cuenta al erario público, es decir, a ti y a mí. Y lo hace con la conciencia muy tranquila, porque, según él, "no ha hecho nada ni legal ni moralmente reprobable". Para un ciudadano de a pié, acostumbrado a pagar todo lo que hace, le resulta difícil comprenderlo. Pero es obvio que estamos equivocados y bien claro que lo dijo en la rueda de prensa, con esa cara de obispo bien comido y bebido. Pongámonos en su lugar y comprobaremos que el hombre tiene razón, porque como Presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, todo, repito, todo lo que hace en su vida, incluso en la cama (y no quiero ser insidioso), es oficial, lo hace sacrificándose, como buen cristiano que es, por todos
nosotros. Y es de justicia, y él de eso sabe mucho, que lo paguemos los ciudadanos.
Ese personaje, junto con otros cuantos de su misma ralea, echaron a Garzón de la carrera judicial. ¡¡Qué país!!

Y qué decir de Bankia, otra de las joyas de nuestros días. Arruinan el banco, arruinan a los inversores cuyas acciones han perdido el 80 por 100 de su valor, nos arruinan a todos los ciudadanos que estamos pagando 500 euros por cabeza para llegar a esos 22.000 millones de euros que les van a dar. Y todos se van de rositas. Empezando por Rodrigo Rato y siguiendo por los consejeros del PSOE o de los sindicatos que estaban en Caja Madrid. O es que dicen lo mismo que el presidente de otra caja en ruinas que "el no tenía tiempo ni la formación para analizar los balances". Pero sí que tenían tiempo y la formación específica de un chorizo para llevarse todos los meses varios miles de euros. ¡Qué país!

Tendremos que hacer caso a nuestro presidente y esperar que "la Roja" nos dé una alegría las próximas semanas, porque lo que es el gobierno nos seguirá dando disgustos. ¡Qué país!

Mientras, siempre nos quedará el cine. Yo de momento os dejo y me voy a a ver "Esplendor en la hierba", que la ponen en la tele.

Muchas gracias.